A lo largo de siglo y medio en los escenarios de todo el mundo, numerosos han sido los intentos de erradicar las diferencias de clase, raza y género entre los dos protagonistas de la ópera más célebre de Georges Bizet: entre Carmen, la femme fatale gitana, y José, el militar honorable que sucumbe a sus encantos. Pero también entre la mujer libre e íntegra que acaba asesinada por un hombre carente de fortaleza moral.